miércoles, 15 de febrero de 2012

EL VUELO DE LA LUCIÉRNAGA. Cartas a mi madre

Lágrimas.   Julia Gómez Lasheras Abril del 2010

Después del largo camino que supone
el aprendizaje de la pérdida,
nuestras lágrimas se han transformado en eslabones de madurez,crecimiento y serenidad.
Cuando hemos llegado a nuestra última parada
de un largo viaje de incierto final,
tras haber elaborado el duelo por los ausentes,
dejamos atrás
la incertidumbre, la soledad, la rabia y la ira,
transformándonos en seres luminosos,
porque hemos recibido el regalo y la oportunidad
de poder seguir creciendo como personas,
desprendiéndonos de lo superfluo y trivial,
aprendiendo a valorar la transcendencia de lo vivido
al ser conscientes de nuestra efímera existencia
y cada palabra, cada gesto compartido con nuestros seres queridos
son un regalo de la Vida.
No importa qué ocurrirá mañana,
hoy celebramos que estamos vivos
y podemos tener la oportunidad de manifestar a nuestros seres queridos
lo mucho que nos importan.
Si somos capaces de vivir cada instante, cada experiencia como un regalo ,
nuestra vida y la de los demás será más plena,
y seremos capaces de aportar instantes irrepetibles
a quienes nos ayudan a caminar desde la humildad, el amor, la aceptación y el respeto,
y sobre todo,
aceptar la enfermedad , el deterioro y la muerte, como un proceso de crecimiento,
dándole nuestro amor a aquellos que nos necesitan para iniciar su tránsito vital.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

EL VUELO DE LA LUCIÉRNAGA. Cartas a mi madre

Cuando ya no esté.            Julia Gomez Lasheras

Cuando ya no esté, no quiero que me idealices
convirtiendo mi recuerdo en huellas imborrables ,
plenas de virtudes , y apenas defectos.
Cuando ya no esté,
recordarme en vuestra memoria,
porque así seguiré viviendo en los recovecos del corazón.
Cuando ya no esté,
ayúdate a ti mismo aportando amor a otros;
tus lágrimas serán bálsamo que reconforten heridas profundas,
no temas mostrar tus emociones,
porque es el precio a pagar
en el tránsito de la vida.
Tómate tu tiempo
para aceptar mi partida,
no te niegues el llanto, ni la tristeza  al evocar mi recuerdo,
porque te ayudará a sanar tus heridas
y no importa lo que aquellos bienintencionados te aconsejen,
escucha tu voz,
que sea tu propio yo quien te marque el camino de regreso.
Cuando ya no esté
aprovecha mi partida como mi último regalo:
el regalo de la vida,
áquel que te ayudará a vivir más plenamente  al no ignorar
que todo principio tiene su final,
que tras el dolor hay cabida para la esperanza,
que decir adiós,
nos convierte más sabios
porque hemos sido capaces de desprendernos de lo banal y lo superflúo
para poder reencontrarnos con nosotros mismos.
Cuando ya no esté,
honra mi memoria  sin los imperativos del deber,
sólo hazlo si lo sientes así,
acuérdate de mi desprovisto de resentimientos,
y libérate de los lastres que condicionan tu crecimiento,
sólo así, serás una criatura libre y en paz contigo mismo,
que la paz sea contigo.

domingo, 30 de octubre de 2011

"La vuelta a Casa"

El título resume mi experiencia en este retiro de la Fundación. Primero; porque en Calatorao me siento como en mi hogar: caras conocidas, una casa acogedora, y las puertas abiertas que nos brinda nuestra anfitriona Mar. Segundo; porque me ha permitido volver a mi "casa real", a contactar con mi ser, el cual siempre está ahí; pero la vida diaria me mantiene distraido y no me deja ver.
Se forma "la cordada" de todo el grupo y comienza el viaje. No sé a dónde me llevará, pero no importa; porque confío plenamente en la Guia; tiene el mapa del viaje y conoce el territorio.
Primera parada: sentarse en la inmovilidad; la meditación es una gran ayuda, para ir quitando capas de la cebolla, que soy, y para poder atisbar como se siente esa persona moribunda, en su lecho, sin escapatoria posible. Suena la campana y siento alivio de no estar en su lugar...

Ahora, llega el momento de la verdad, me tumbo en mi lecho y, de aquí sí que no puedo escapar. Estoy agitado, inquieto; sin embargo, mi cuidador está a mi lado, noto su presencia y, sin que haga nada, me siento reconocido porque está conmigo, de verdad, sin querer cambiar el momento presente, y sin máscara. Sus cuidados con sanadores, su toque suave, tierno, reconociendo mi humanidad. ¿ Me habré muerto ya, y estoy en el cielo ?...
Vivo en mis propias carnes la importancia del contacto verdadero, lo frágil que soy en ese momento y la necesidad de este toque real y sereno... ¡Ojalá el universo me regale una muerte semejante !

Ahora cambian las tornas, yo soy el cuidador. Mi moribundo está agitado, inquieto; sin embargo, gracias al aprendizaje vivido anteriormente, me mantengo en la quietud, estoy con él con todos mis sentidos, dejando que muestre su verdadera naturaleza.
Me permite tocarle, y recuerdo cómo sentía yo los cuidados cuando estaba en su lugar. Despacio, más despacio, sintiendo su piel... No sé quién recibe más, él o yo, para mí es maravilloso poder expresar toda la sensibilidad que puedo dar, desde mi verdadero ser, y  no desde "el buen samaritano" que, a veces, creo ser.
El viaje continúa, el siguiente puerto me permite ver como actúo en mi vida, desde la distancia, me doy cuenta de lo inconsciente que soy muchas veces, de mi intransigencia y de que intento que los demás sean como yo quiero que sean, y de los defectos que veo en los demás  que también están en mí..  ¡ Y yo que me creía que era perfecto !
Y el barco vuelve a zarpar, permitiéndome adentrarme aún más en el silencio y acercándome a mi ser. Los sentidos se intensifican, me doy cuenta de detalles que antes no percibía; el sonido del viento, un pájaro que se mece entre las nubes, los árboles bailando al unísono, las hojas chapoteando en lo invisible, el olor a campo... y el resto del grupo, sintiendo todos a la vez, como un solo ser; ¡ qué maravilloso !. Doy gracias a la Madre Tierra por estos regalos.
Ya tengo más deberes para casa: cultivar la atención; al comer, sólo comer, al caminar, sólo caminar, al estar con alguien, estar presente totalmente.
Pero no solo de aire vive el hombre, así que toca la comida, ¡ y qué comida !, sabrosa, nutritiva, ligera, se nota que está hecha con conciencia, con atención, gracias Miguel...
Se termina el viaje y me parece que acaba de empezar, que nunca me he ido; sin embargo, me siento diferente, miro una foto que he visto cientos de veces y me parece que es la primera vez que la veo de verdad, llena de matices, incluso puedo ver más allá de lo que el ojo no ve.
Siento que quiero volver aún cuando aún no me he ido. Intentaré aplicar todo lo aprendido y experimentado, ese es mi reto.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Conclusión foros de encuentro (18/03/10). Voluntades Anticipadas II


OBJETIVOS DE LA REUNIÓN

  • Definir el Documento de Voluntades Anticipadas (DVA).
  • Aspectos técnicos: representantes, testigos, tramitación….
  • Contenido personalizado: cómo queremos el acompañamiento, el contexto…
  • Contestar y en la medida de nuestras posibilidades, aclarar las inquietudes que surjan a lo largo de la reunión.

NECESIDADES SENTIDAS Y POSIBLES TEMAS A DESARROLLAR

1. Reconocer que el DVA es una herramienta clave si, por incapacidad física o mental no podemos decidir en el momento final, ya que tanto los profesionales que nos estén atendiendo como los familiares o acompañantes, deberán acatar lo escrito en el Documento, al margen de la confrontación que ejecutarlo nos pueda crear. Hemos de tener en cuenta que el DVA pasa antes por el filtro de la administración, una vez aprobado por ésta, nadie, que no sea el propio paciente, podrá modificarlo o invalidarlo. El DVA puede ser revocado o modificado en cualquier momento por el paciente.

2. Aunque existe un modelo oficial estándar, el documento puede ser también personalizado y enriquecido según las demandas de cada persona, las posibilidades son infinitas, siempre dentro de una lógica y una legalidad. Se pueden incluir otras demandas como: quién y cómo será el acompañamiento y los cuidados paleativos, la atmósfera de la habitación, acompañantes, exequias…..
A través del DVA tenemos posibilidad pormenorizar cada paso y asegurarnos un buen morir y un buen acompañamiento hasta el final. Cuidar de los detalles es una gran ayuda para el duelo de los que han estado acompañándonos.

3. ¿Quién nos representará?. Se precisa de un diálogo sincero con nuestro representante. El hecho de ser familia, no lo convierte automáticamente en la figura ideal, los vínculos emocionales y el dolor de la despedida, a veces entran en conflicto con nuestros intereses. El representante está por encima de los deseos de la familia, por eso es necesario que sepa como piensas y como sientes y no entre en conflicto a la hora de acatar tus deseos.

4. Los testigos serán mayores de edad, a partir del segundo grado de consanguinidad y sin vínculos de relación patrimonial.

5. El DVA está aprobado por el Congreso de los Diputados.

6. El SALUD (Servicio Aragonés de Salud)  tiene un registro de los documentos presentados dentro de Aragón. Si se realiza a través de la Fundación, ésta se queda una copia como registro y también el representante debería tener una. Hay un registro nacional pero no está intercomunicado con el aragonés.

7. Antes, el DVA pasaba por un comité de bioética; ahora, ese proceso se ha eliminado. Ante posibles dudas éticas, será un personal especializado el que revise el documento, agilizando, de esta manera, la aprobación de los DVA.

8. En Andalucía, se ha dado un paso más y contemplan un número mayor de posibilidades clínicas, dándole al paciente más capacidad de decisión sobre las medidas a tomar en cada caso.

9. Aunque en Aragón somos una Fundación pionera en su campo, existe otra en Burgos, llamada  "FUNDACIÓN VERDE ESMERALDA”.

10. Desde la FUNDACIÓN VIVIR UN BUEN MORIR, recogemos la inquietud de muchas personas con respecto al tema de los accidentes de tráfico (contemplando lógicamente aquellos que produzcan un daño irreparable) y la utilización del DVA. En los casos de urgencia como un accidente, por ejemplo, el protocolo a seguir no contempla principalmente, por aspectos prácticos, la búsqueda del DVA de esa persona, sino salvar su vida por encima de todo. Aunque lo ideal sería que el acceso al  DVA  fuera fácil e inmediato, la realidad no se corresponde y menos en casos en los que cada segundo es vital, y prima salvar la vida del accidentado. Por ello, es fundamental que en nuestro teléfono móvil, precedido por dos "AA" llevemos el nombre de la persona que sabe lo que queremos y nos va a representar, en el caso de que nosotros nos encontremos incapacitados para ello. De ahí, remarcar el hecho de que el representante debe ser alguien escogido por afinidad,  no sólo por consanguinidad.

11. Hay una gran labor que realizar aún, con respecto a la sensibilización de las personas que nos transmiten las noticias más dolorosas. Existen protocolos al respecto, que nos ayudarían a atenuar, en la medida de lo posible, el impacto de la noticia que vamos a dar. Cuidar todos los detalles es importante; escoger las palabras más adecuadas, el tono, la atención… ayudaría a aquel que lo recibe, a empezar un mejor duelo y a enfrentar el proceso de despedida.

viernes, 2 de julio de 2010

Conclusión foros de encuentro (18/02/10). Voluntades Anticipadas

Estos son los temas más destacados tratados en los Foros de encuentro (18/02/10), realizado en la biblioteca de Aragón (Dr. Cerrada) -el próximo será en Octubre-.


El Documento de Voluntades Anticipadas (DVA), es un documento con indicaciones anticipadas que realiza una persona en situación de lucidez mental para que sea tenido en cuenta cuando, a causa de una enfermedad u otro evento -y encontrándose en una condición física o mental incurable o irreversible y sin expectativas de curación-, ya no le sea posible expresar su voluntad. La persona que realiza el testamento define como quiere se produzca su muerte si se dieran unas deternimadas circunstancias. En este sentido puede decirse que define lo que para él es un muerte digna en un contexto de final de la vida.


La mayoría de los modelos incluyen el nombramiento de un representante que servirá como interlocutor suyo con el médico o el equipo sanitario para procurar el cumplimiento de las instrucciones previas. Por tanto, la existencia del documento evita la amplitud de interpretaciones que pudieran darse tanto por los profesionales médicos como los familiares y hace valer la posición única del paciente.

Los temas en relación tratados en el foro han sido:
Inquietud latente relacionado con el cuidado en residencias geriátricas, para conseguir una actuación de calidad, en conjunto entre el personal de la residencia, el enfermo y sus familiares.

Importancia en la elección del representante que apoyará las decisiones del otorgante del DVA.

Necesidad de informatización del DVA en todos los organismos oficiales de Sanidad, entre las Comunidades e incluso a nivel internacional. Actualmente los países que cuentan con respaldo legal ante las voluntades anticipadas son Estados Unidos, Australia, Canadá, Dinamarca, Holanda, Nueva Zelanda, Reino unido y Suiza

En caso de gravedad y no tener redactado el DVA, se puede solicitar en la misma unidad de Urgencias donde se es atendido.

El DVA ayuda a tomar consciencia de qué hacer y facilitar a nuestro entorno, nuestros deseos más íntimos antes, durante y después del proceso de la muerte.

Es útil tener registrado en el teléfono móvil, en el primer lugar de la guía, a las dos personas con las que queremos que se contacte para que comuniquen nuestras últimas voluntades.

El DVA va dirigido a todos, sin credos, ni ideario político.

La Fundación Vivir un Buen Morir ofrece ayuda y asesoramiento en la confección del DVA. Este servicio es gratuito para miembros de la Fundación.


viernes, 25 de junio de 2010

Conclusión de los foros de encuentro (26/11/09)

Estos son los temas más destacados tratados en los Foros de encuentro (26/11/09), realizado en la biblioteca de Aragón (Dr. Cerrada) -el próximo será en Octubre-.

Invitar a todos a participar libremente y de forma gratuita a los foros para, de esta manera, socializar el proceso que estamos viviendo.
Estos encuentros no constituyen en sí mismos una terapia.
Crear un  espacio de comunicación  de las vivencias personales, un foro de escucha y respeto, sea cual sea la ideología, creencias o vivencias que los participantes profesen o expongan.
Equipo multidisciplinar  (con  los voluntarios, profesionales sanitarios, personas invitadas a las sesiones ajenos o no al ámbito sanitario o a la fundación…), en conclusión, todos aquellos que sientan inquietud por compartir sentimientos, experiencias, opiniones… desmitificando de esta manera y abordando en un cuidado contexto, el tema de la muerte, contemplándolo desde todos los puntos de vista, desde todas las creencias y desde cada caso en particular, socializar, en una palabra, algo que es una constante en nuestras vidas.
Necesidades sentidas  y posibles temas a elaborar:
  • Aprender a cuidar la atmósfera donde se desarrolla la vida del paciente.
  • Aprender a aceptar la vida con sus procesos.
  • Suscitar una mayor sensibilidad al personal sanitario.
  • Crear un compromiso de confrontación  personal y no prolongar la agonía.
  •  Apoyar emocionalmente  desde los recursos  de Atención Primaria.
  • Conocer el arte de acompañar.
  •  Informar  sobre los cuidados paliativos en casa.
  •  Permitir el proceso y respetar al que está en negación.
  •  Hacer las últimas voluntades (testamento vital, de herencia…)
  •  Educar   al personal sanitario  en su relación con la muerte (formado única y fundamentalmente para salvar vidas).
  •  Permitir  soltar  y dejar ir en paz;  sentirse capaz  de asumir la voluntad del enfermo.
  •  Observar actitudes que tomo como: paciente, acompañante, visitante y trabajador.
  •  Transmitir la experiencia personal.
  • AFRONTAR NUESTRA PROPIA MUERTE.
  • Vivir en presente.

viernes, 11 de junio de 2010

Cara a cara con la muerte

¡Buenos días, Cantabria! Perdonen que empiece con algo personal, pero es que ha muerto mi padre, y como comprenderán no me puedo abstraer de ello tan fácilmente. Para mí, como ocurre siempre con los hijos, mi padre era un hombre bueno, sencillo, alegre y generoso, que dedicó su vida al servicio de su familia y de los demás, sin hacer ruido. Fue mi mayor maestro. Lo poco bueno que tengo se lo debo a su ejemplo callado. Cuando debido a mis errores descendí en vida a los infiernos, la mano de mi padre es la que siempre estuvo tendida sin un reproche y a la que pude asirme para salir de allí. Yo nací en sus brazos y sentía la necesidad de que muriera en los míos para cerrar el círculo y acompañarle en el momento más importante de su vida. Le pedía a Dios que me concediera ese deseo y tuve el privilegio de que así fuera. Ha sido la experiencia más gratificante que he tenido nunca, el encontrarme cara a cara con la muerte, con la de mi padre y también en cierto modo con la mía.

Todo esto me sirve para hacer una reflexión para todos sobre la muerte. En el misterio de la existencia humana, de la cual no sabemos nada, y lo poco que creemos saber es por ideas de una u otra manera prestadas, la única certeza que tenemos es que nuestro organismo cuerpo-mente va a morir, y con él este personajillo que hemos creado con nuestras sucesivas máscaras y con el que erróneamente nos identificamos, lo que llamamos el ego. Pues bien, como decía esa es la única certeza y resulta que vivimos de espaldas a ella. Le tenemos miedo a la muerte, aunque no lo reconozcamos conscientemente, y de ahí derivan todos nuestros miedos y el sufrimiento correspondiente. Yo como todos también tenía mis ideas al respecto, pero eran solamente eso, ideas. Al vivir en directo la muerte de mi padre en total conexión con él, he experimentado que la muerte es parte inseparable de la vida, es en realidad una transformación y que el tránsito es muy fácil y bello. En ese trance, como siempre sin palabras, mi padre me regaló su última gran lección. Vivamos día a día la presencia de la muerte con naturalidad, sin miedo. Cuando llegue nuestro momento tratemos de vivirlo conscientemente y en él se nos revelará por fin el misterio de la existencia. Será el climax, el punto culminante de nuestro camino. Al encontrarnos cara a cara con la muerte nos encontraremos por primera vez cara a cara con la vida, con la verdadera realidad. El gusano encerrado en su capullo, cuando se encuentra con su aparente muerte, se convierte en una mariposa libre para volar, su verdadera naturaleza.

Entre otras cosas íntimas que le manifesté a mi padre en los instantes finales, y con una cierta ironía y humor para desdramatizar del todo el momento, le dije:
“Papá, allí donde vayas sigue cuidando de mí, que ya sabes que tengo mucho peligro”. El, ya sin fuerzas para hablar, pero totalmente consciente, hizo un gesto sonriendo y elevando la mirada como diciendo: “Hijo, ya te vale, todavía ahora me sales con esta embajada”.
 
Testimonio de Jesús Blanco Rojo, Colegio de Arquitectos de Cantabria